Quiero desgastarme las uñas, arrancármelas ya!no soporto mi piel ya no pueden morderla más,
doy vueltas en los callejones de mi sometida habitación
revuelco mi alma desnuda en mis noches de desolación.
Quiero cobijar la ciudad que vive en mi cerebro
con el dolor de lo que no puedo tocar jamás,
quiero pintar cuervos que le arranquen los ojos a la luna
y serpientes que envenenen el aire que he de respirar.
Desgarrar las entrañas, agotando el miedo de mí mismo
ver el mundo en hojas de papel, donde la realidad sea insana,
quiero ignorar los destellos de la luz y ver sombras
quiero ocultarme de la oscuridad y encender mi propia luz,
olvidaré que estuve vivo, humillaré a mi realidad
y sepultaré los cielos que me vieron crecer en esta mentira,
uniré mis venas a las arterias del mar y de la atmósfera
concentraré mis ideas en un cúmulo de pensamientos perturbados.
¿Cuántas personas hay a mi alrededor?
Yo quiero desmayarme en medio de sus triviales existencias,
pero es caro el precio y ahora gritaré al vació,
vengo a pagarlo!!!
trágame maldito aliento de la nada…
Suenan las sonrisas, mi mirada,
maniática, perdida, jodida, corrompida
el espejo en el agua es claro,
no es el agua, es mi rostro desfigurado.
¿Ayuda? no gracias;
mira mis manos, es mi naturaleza,
estoy mirando al techo,
mis ojos son blancos,
como negros los pensamientos.
Mi sonrisa esta colgada de tus miedos,
sacrificando mis buenos modales.
Estoy tan deseoso, tan ansioso de ver ese lugar,
recorreré el sendero de esa pútrida alcoba
que me lleva a la antesala del vacío,
que bonito bosque, que bonita ciudad, que bonitas aldeas
quiero quedarme ahí dormido para siempre,
No vengas, no te he llamado,
quiero dormir tranquilo,
perdí los sentidos
ahora si me guían los instintos.
Sonrío ante mi sombra,
creo que llegué por fin.
