domingo, 6 de julio de 2008

La Fuente de Sangre

Creo sentir, a veces que chorros de mi sangre
Se me escapan en sollozos igual que una fuente.
Oigo claramente su queja dolorida,
Pero me palpo en vano para encontrar la herida.

Y corre como si fuera regando un descampado,
Y en curiosos islotes convierte el empedrado,
Apagando la sed que hay en toda criatura
Y tiñendo por todos sitios de rojo la visión.

A menudo también del vino he demandado
Que aplaque por un solo día mi terror.
¡Pero el vino,
Torna el mirar más claro y el oído más fino!.
Tampoco en el amor el olvido he encontrado:
Ha sido para mí un lecho de alfileres,
Hecho para saciar la sed de las mujeres.


7 comentarios:

Rogger Brito R. dijo...

Como adoro cada una de las palabras de este maldito, cada letra, cada verso, siento profundamente que en otra vida ya las había leido, las había sentido mías, como ahora...

En el Infierno nos volvemos a encontrar Charles Baudelaire.

Catalina Zentner Levin dijo...

´No sé si las leíste, pienso más bien que las escribiste y renacen hoy con toda la furia de tormentas interiores que llegan desde el arcano y continúan arrasando pasiones...

dijo...

un lecho de alfileres... así suele ser la vida.
Ojalá aprendamos...
besos

Akasha Déclenché! dijo...

El mundo teñido está con el carmín de los más impúdicos deseos... sigamos la adoración ante el abismal legado de Monsieur Baudelaire.

Que El Espejo Humeante De La Noche Te Comparta Su Energía.

Anónimo dijo...

El amor eso como uan rosa, tienes unos petalos rojos, frescos y perfumados pero no hay q olvidar, q tambien tiene sus espinas q cuando se clavan, hacen mucho da�o.
salu2 :))

Merlina dijo...

El amor es solo una utopia.

No hay paz ni tranquilidad es solo el hedor de las flores.

Hermoso poema.
Me encantan tus arboles, podría tomarlos.

OOXX
Saludos desde México

Gittana dijo...

Tal vez fue tu otra vida...